Como lo cuentes... cuenta

¿Cuantas veces nos hemos quedado literalmente sin habla cuando estamos frente a la persona que nos encantaría para ser nuestra pareja? Nos traicionan los nervios y ya no sabemos que decir, o simplemente nos ataca ese instinto animal que nos hace literal pavonearnos como si del cortejo de un ave se tratara... y todo esto después de ser interiorizado nos deja con la terrible sensación de si hubiera dicho o me hubiera comportado de otra forma quizá habría obtenido la segunda cita...

Y es que definitivamente la primera impresión es la que cuenta y más allá del atractivo físico (aunque si tiene un peso que hay que tomar en cuenta), la personalidad, el carisma y la forma en que decimos lo que tenemos que decir influye muy poderosamente en si lograremos acercarnos más a esa persona especial o tendremos que intentarlo de nuevo con la siguiente.

Entonces ¿por qué seguimos dejándole a ese momento donde nos asaltan los 5 minutos de quedarnos out nuestro futuro amoroso? cuando en realidad podríamos empezar por algo tan simple como: 

Contar una historia...

Podría sonar como un disparate, sin embargo, si lo pensamos correctamente, ya que el cortejo y el acercamiento con quien creemos que sería nuestra pareja ideal es muy relevante para nosotros, porque no ensayar aquello que vamos a decir como discurso principal para que por lo menos pasemos a la segunda cita y dejemos que sean nuestras palabras persuasivas las que hagan olvidar por un momento como nos vemos o como estamos vestidos, o si en ese momento estamos limitados de dinero y no pudimos impresionar con un gran lugar para la primer cita.

Hacer nuestra historia nos dará una ventaja competitiva ante los demás predadores que quizá son más rápidos, más atractivos o con mayores recursos a su disposición, si cuentas la historia correcta en el momento adecuado créeme, podrías tener una mejor oportunidad.

Y ya que es un tema bastante complejo te dejo esta clase para que puedas saber exactamente como contar la historia que puede ser el inicio de tu romance de película: Como crear una historia impactante